El Desnudo Femenino en la Fotografía

A riesgo de que algunas personas se ofendan o se tomen este post a modo personal, hace tiempo que tengo ganas de analizar los desnudos femeninos.

Inicialmente, los desnudos me parecieron una hermosa manera de liberación femenina: El poder sacar fotos de nuestra desnudez, sin que resulte algo pornográfico, consumible y cosificativo. Algo que nos mostrara naturales, como personas. No como objetos.

Pero no fue hasta hace poco que empecé a notar que la mayoría de estas fotos termina siendo imán de hombres. Y entonces me pregunto si los seguimos alimentando, sólo que con otro tipo de alimentos

Si esta herramienta, que inicialmente era de liberación, ahora es otra manera de cosificarnos.

Fui con todas estas dudas a Instagram y debajo comparto un puñado de opiniones que recibí:


¿De quién depende la interpretación y consumo del desnudo?

  • «El significado final de la foto va a depender de la intención del sujeto, de las poses y del contexto«
  • «Depende de cómo te muestres. Si es un desnudo que hipersexualiza, entonces está totalmente destinado al consumo«
  • «Depende de la intención del que lo consume«
  • «Depende del contrato de lectura que haya entre el productor del discurso (en este caso fotógrafx) y quien lo recibe en términos de semiología. Por ejemplo, no es lo mismo el contrato de Emily Ratajkowski con su público que el que construye un fotógrafx de cuerpos no hegemónicos«
  • «Creo que ya no es lo que nosotras queremos demostrar al hacerlo sino también como el resto lo toma«

¿El desnudo libera o cosifica?

  • «Creo que libera cuando no se reproducen los estereotipos de cuerpos hegemónicos«
  • «Depende de si se lo reduce a condición de objeto para ser mirado o busca producir sentido a través del gesto«
  • «Siento que libera porque abandonamos muchas prisiones, pero también se le termina dando demasiada importancia al cuerpo. Entonces al final también se termina cosificando«
  • «Libera porque es lo contrario de lo que se espera de nosotras como «puras» pero a la vez hay otro oculto, «el núcleo machista», que espera nuestra imagen desnuda puesta en consumo«
  • «Independientemente de la intención, el cuerpo femenino se percibe como objeto de consumo«
  • «Existe una sexualización de los cuerpos sean hegemónicos o no. No es culpa de la modelo o la fotógrafa sino del patriarcado«
  • «Capaz estás haciendo un desnudo para nada «orientado al consumo» e igual alguien puede hipersexualizarlo. ¿De que manera se puede deconstruir el desnudo?
  • «¿Hasta qué punto se consumen desnudos cosificadores sin darse cuenta?«
  • «Para mi cosifica en términos de que generalmente se realiza de forma estéticamente agradable o consumible«
  • «Es un tema el de los desnudos en la fotografía principalmente porque ahora la mayoría son con lencería de encaje y poses que normalmente no haríamos. Entonces no veo la diferencia entre lo que vemos en una publicidad de los medios masivos y una de acá.  Repetimos patrones, no estamos visibilizando nada. Nada más cambiamos el cuerpo y lo cubrimos bajo un discurso feminista«
  • «Por más que la intención este en buen lugar, se termina desvirtuando y se cosifica. Pero si dejamos de hacer cosas que nos liberan por el ojo torcido de algunos, considero que tenemos más para perder nosotros«
  • «No considero que ese acto empodere«
  • «Continuamente creemos que lo que vale más es nuestro cuerpo y es justamente lo que se cosifica ya de por si por la sociedad. Nosotras podemos tener la intención de sacarnos esa foto que nos ayude a querernos más, pero:
  1. Ese contenido puede usarse en contexto como la pornografía
  2. Inconscientemente termino creyendo que me tengo que hacer valer por mi cuerpo«

¡¿Entonces?!

Ya no puedo recordar quien me lo dijo, pero hubo un comentario que me quedó resonando:

¿Que se supone que debemos hacer? ¿«Abolir» los desnudos porque el patriarca es inteligente y siempre lo va a terminar consumiendo? ¿O seguir haciéndolos para demostrar, firmemente, que es una expresión artística digna de admiración e inspiración? Feminismo ES liberación.

Y tiene razón: Abolir los desnudos sería lo mismo que pedir que usemos pantalones para «evitar que nos violen». Sin embargo, creo que este es un buen momento para revisar nuestro trabajo y ser responsables con la manera en que mostramos los cuerpos, de manera de que no terminemos cayendo en las trampas que justamente queremos combatir.

Evidentemente, sin quererlo, todavía tenemos imágenes y conceptos patriarcales sobre la forma y exposición de los cuerpos grabadas en la cabeza. Y hay que borrarlas.

Personalmente, quiero ver más cuerpos de Domingos por la mañana.